martes, 30 de septiembre de 2014

Septiembre 30

        ¿Qué es lo que más quieres de un culpable y miserable pecador, sino que se arrepienta y llore por sus pecados?
      De la sincera contrición y de la humillación interior brota la esperanza del perdón, se reconcilia la conciencia trastornada, se recupera la gracia perdida y se protege el hombre de la ira futura. Dios y el alma arrepentida se apresuran para darse fraternalmente el abrazo de paz.

lunes, 29 de septiembre de 2014

Septiembre 29

         2. Señor, ¿qué he realizado yo para merecer algún consuelo celestial? No recuerdo haber efectuado nada de bueno, sino que he sido siempre inclinado a los vicios y tardo en enmendarme.
      Esta es la verdad y no la puedo negar. Si afirmara otra cosa tú te pondrías en contra de mí y ya no habría nadie que me pudiera defender.

domingo, 28 de septiembre de 2014

Septiembre 28

        CAPÍTULO 52
 
JUZGUÉMONOS DIGNOS
DE CASTIGO Y NO DE CONSUELOS.
 
        1. Señor, no soy digno de tus consuelos ni de ninguna visita espiritual tuya, y por lo tanto obras correctamente conmigo cuando me dejas pobre y apesadumbrado. Aunque derramara un mar de lágrimas tampoco sería digno de tus dulzuras. De manera que sólo merezco azotes y castigos porque con frecuencia y gravemente te he ofendido y he pecado mucho y de muchas maneras.

sábado, 27 de septiembre de 2014

Septiembre 27

         2. En estas circunstancias te conviene refugiarte en ocupaciones humildes y externas, fortalecerte con buenas obras, aguardar con firme esperanza mi venida y mi visita celestial y soportar con paciencia el destierro y sequedad de espíritu hasta que yo vuelva nuevamente a ti para liberarte de todas tus angustias.

viernes, 26 de septiembre de 2014

Septiembre 26

        CAPÍTULO 51
 
HACER LAS COSAS HUMILDES
AL NO PODER REALIZAR LAS GRANDES
 
        1. Hijo, no puedes perdurar continuamente en fervientes anhelos de virtud ni permanecer en un alto grado de contemplación. Algunas veces, por razón de la culpa original, es necesario descender a cosas más humildes y sobrellevar también la carga de esta vida corruptible aunque te cueste y sea contrario a tus deseos.

martes, 23 de septiembre de 2014

Septiembre 25

         7. Señor, hazme comprender lo que debe ser comprendido, amar lo que se ha de amar, alabar lo que a ti te agrada por encima de todas las cosas, apreciar lo que para ti es precioso y detestar lo que es abyecto a tus ojos.
      No permitas que yo juzgue según la visión de los ojos corporales ni sentencie por lo que se oiga decir (Is. 11,3) a hombres inexpertos, sino que discierna con sano juicio entre lo visible y lo espiritual y sobre todo busque siempre cumplir aun las mínimas manifestaciones de tu voluntad.

Septiembre 24

        6. Padre amado, estoy en tus manos, me inclino ante la vara que me corrige. Fustiga la espalda y mi cerviz para que enderece mi camino torcido hacia tu voluntad. Conviérteme en discípulo piadoso y dócil, como tú bien sabes hacerlo, para que te obedezca a una simple indicación tuya. Todo mi ser y todo lo mío te lo entrego para que lo corrijas. Es preferible ser reprendido aquí que en la vida futura.

Septiembre 23

        Sobre esta tierra nada sucede que no lo haya dispuesto tu providencia y sin una causa.
      Bueno es para mí, Señor, que me hayas aflijido, para que aprenda tus mandamientos (Sal. 118, 71) y destierre de mi interior toda soberbia y presunción. Es provechoso para mí que la vergüenza haya cubierto mi rostro para que busque consolarme en ti más que en los hombres.
      De tal manera aprendí a temer tu inescrutable juicio con el cual aflijes tanto al justo como al pecador, pero siempre según equidad y justicia.

lunes, 22 de septiembre de 2014

Septiembre 22

        3. Padre justo y siempre digno de alabanza, ha llegado para tu siervo la hora de la prueba. Padre digno de todo amor, es justo que tu siervo padezca algo ahora por tu amor. Padre por siempre adorable, ha llegado la hora prevista por ti desde la eternidad en que tu siervo deba sucumbir exteriormente por un poco de tiempo para vivir siempre interiormente contigo.

domingo, 21 de septiembre de 2014

Septiembre 21

        2. Suspiro el gozo de la paz, clamo por la paz de tus hijos por ti alimentados con el esplendor de la consolación. Si me das esta paz y si derramas en mí este santo gozo, el alma de tu siervo te cantará con alegría y te alabará con fervor.

sábado, 20 de septiembre de 2014

Septiembre 20

        1. Señor Dios, Padre santo, bendito seas ahora y por siempre, porque se hizo lo que tú quisiste y lo que tú haces es bueno. Que tu siervo se alegre en ti, no en sí mismo o en alguna otra persona, porque tú solo, Señor, eres la alegría verdadera, mi esperanza y mi corona, mi gozo y mi gloria.

viernes, 19 de septiembre de 2014

Septiembre 19

        7. Por lo tanto, sométete con humildad bajo la mano de todos, sin mirar quién es el que habla o el que manda. Preocúpate solamente de aceptar como muy oportuno y cuidando de cumplir con firme voluntad todo lo que pueda pedir o disponer el superior, o uno más joven que tú o uno de igual edad que la tuya.

Septiembre 18

        Por un poco de voluntad personal que ahora renuncies con generosidad, gozarás la plenitud de tu voluntad en los cielos. Allí encontrarás todo lo que quieras y todo lo que puedas desear. Allí tendrás la facultad de gozar del bien total, sin peligro de perderlo.

Septiembre 17

       En estas cosas, y en otras semejantes, el Señor prueba la fidelidad de su siervo para ver si sabe abnegarse y vencerse en todo a sí mismo.
       Tal vez no haya nada tan importante como la necesidad de morir a ti mismo cuando ves y consideras que las cosas repugnan a tu voluntad y principalmente cuando juzgas poco razonable y de insignificante utilidad lo que te viene mandado.

lunes, 15 de septiembre de 2014

Septiembre 16

        4. Todavía tienes que ser probado sobre esta tierra y pasar por muchas ejercitaciones. De vez en cuando te será dado algún consuelo, pero no te será concedida la satisfacción completa.
      Sé fuerte y ten ánimo (Jos. 1, 7) tanto en el obrar cuanto en soportar lo que es contrario a la naturaleza. Es necesario que te revistas del hombre nuevo y te transformes en otro. Es indispensable que con frecuencia hagas lo que no quieres y que dejes lo que prefieres.

Septiembre 15

         Con frecuencia así sucede también con tu deseo, porque le agregas algún detalle muy inoportuno: no es puro ni es perfecto lo que va mezclado de interés propio.
      3. Pídeme no lo que es para ti agradable y cómodo, sino lo que es para mí aceptable y honroso, porque, si lo juzgas rectamente, debes preferir y anteponer mis disposiciones a tus deseos y a cualquier cosa que hayas podido codiciar.

domingo, 14 de septiembre de 2014

Septiembre 14

CAPÍTULO 49
 
EL DESEO DE LA VIDA ETERNA Y
LOS BIENES PROMETIDOS
A LOS QUE LUCHAN
 
        1. Hijo, cuando experimentes un deseo de eterna felicidad que te es infundido desde lo alto,  cuando suspires salir de la pobre morada del cuerpo para poder contemplar mi luz, sin ninguna sombra que la pueda alterar, ensancha tu corazón y recibe con toda solicitud esta santa inspiración.

sábado, 13 de septiembre de 2014

Septiembre 13

        Si amo el cielo, gustosamente pensaré en cosas celestiales. Si aprecio el mundo me alegraré con las prosperidades mundanas y me entristeceré de las contrariedades.
      Si amo la carne, mi imaginación se ocupará de argumentos carnales, y si prefiero el espíritu, me deleitaré en asuntos espirituales.
      Cualesquiera sean las cosas que amo, de éstas hablaré y me encantará oír hablar; de éstas me agradará llevar conmigo el recuerdo.

Septiembre 12

           Todavía más. Perdóname y olvida en tu misericordia todas las veces que en la oración pienso en algo que no seas tú. Con toda verdad te confieso, que estoy expuesto a muchas distracciones. Con frecuencia no me encuentro en el lugar en el cual mi cuerpo se halla parado o sentado, sino donde me llevan mis imaginaciones.

Septiembre 11

        4. Consuela mi destierro, mitiga mi dolor, ya que todos mis anhelos se dirigen hacia ti. Todo lo que el mundo me ofrece como alivio, resulta para mí una carga pesada. Deseo disfrutarte íntimamente, pero no puedo conseguirlo. Quiero unirme con las cosas celestiales, pero me atraen las terrenales y las pasiones no domadas. Con el espíritu aspiro ponerme por encima de los bienes materiales, pero por la naturaleza estoy obligado a someterme a ellos.

miércoles, 10 de septiembre de 2014

Septiembre 10

         3. ¿Cuándo terminarán estos males? ¿Cuándo me veré libre de la miserable esclavitud de los vicios? ¿Cuándo, Señor, me acordaré sólo de ti? ¿Cuándo encontraré sólo en ti mi alegría? ¿Cuándo estaré sin ningún obstáculo, totalmente libre y sin ninguna molestia de alma y cuerpo? ¿Cuándo tendré paz verdadera, paz imperturbable y segura, paz interna y externa, paz que no sea amenazada por ninguna circunstancia adversa?
      ¡Oh, buen Jesús! ¿Cuándo llegaré a contemplarte? ¿Cuándo veré la gloria de tu reino? ¿Cuándo serás todo para mí en todas las cosas? (cfr. Cor. 15, 28). ¿Cuándo estaré contigo en tu reino, preparado desde la eternidad para tus elegidos?
      Estoy aquí, pobre y desterrado, en una tierra hostil, adonde diariamente debo luchar y enfrentarme con enormes calamidades.

martes, 9 de septiembre de 2014

Septiembre 9

CAPÍTULO 48

LA ETERNIDAD FELIZ Y 
LAS ANGUSTIAS DE LA VIDA PRESENTE

        1. ¡Oh morada felicísima de la ciudad excelsa! ¡Oh día esplendoroso de la eternidad que la noche no oscurece, continuamente alumbrado por la suma verdad; día siempre alegre, siempre seguro y, por su esencia, siempre inmutable! Ojalá hubiera amanecido ya ese día y hubiera así terminado todas estas cosas transitorias.
      Ese día ya está iluminando a los santos con su perpetua claridad, pero a los que peregrinan aún sobre la tierra sólo los alumbra de lejos y con luz reflejada.

lunes, 8 de septiembre de 2014

Septiembre 8

        3. Si pudieras ver el premio eterno de los santos en el paraíso y de cuánta gloria están gozando aquellos que en este mundo serán considerados despreciables y casi indignos de la misma vida, seguramente te postrarías por el suelo y desearías más someterte a todos que mandar a uno solo. No codiciarías días alegres aquí en esta tierra, al contrario gozarías viéndote atribulado por Dios y tendrías como grandísima ganancia el ser considerado una nulidad entre los hombres.

domingo, 7 de septiembre de 2014

Septiembre 7

        Escribe, lee, canta, llora, calla, reza, sobrelleva con valor las adversidades: la vida eterna vale todas estas luchas y otras mayores también.
        Un día, que sólo Dios conoce, llegará la tranquilidad, y en aquel entonces no habrá día ni noche, como los hay ahora, sino una luz sempiterna, una claridad infinita, una paz estable y un descanso seguro.

sábado, 6 de septiembre de 2014

Septiembre 6

CAPÍTULO 47 

AUNQUE SEA PESADO, TODO HAY QUE SUFRIRLO 
PARA CONSEGUIR LA VIDA ETERNA

       1. Hijo, que las tareas que has emprendido por mí no abrumen tu espíritu, ni te depriman las tribulaciones. Por el contrario, en todo acontecimiento mi promesa te de fuerza y consuelo. Yo te puedo recompensar más allá de todo límite y medida.

viernes, 5 de septiembre de 2014

Septiembre 5

        5. Señor, Dios, justo juez, fuerte y misericordioso (Sal. 7, 12), tú, que conoces la fragilidad y la maldad de los hombres, sé mi fortaleza y toda mi confianza, porque mi conciencia no me basta. Tú sabes lo que yo no sé, y por eso yo habría debido humillarme ante cualquier reprensión tuya y soportarla con resignación. Con tu bondad, perdóname por todas las veces que no lo hice así y otórgame una gracia mayor para sufrirlo todo en adelante.

miércoles, 3 de septiembre de 2014

Septiembre 4

        A mí, por lo tanto, hay que acudir en todo juicio y no confiar en el propio conocimiento. El justo no perderá la tranquilidad por cualquier cosa que suceda (Prov. 12, 21) de Dios. Aunque algo infundado se afirme contra él, no por ello se inquietará demasiado. Como asimismo no se engreirá si otros, con razón, lo defenderán, porque considera que soy yo quien escudriño los corazones y las entrañas (Ap. 2, 23), yo, que no juzgo según la cara y las apariencias humanas.
     Muchas veces, ante mis ojos, es culpable el que según el juicio humano es digno de alabanza.

Septiembre 3

        Yo soy el juez que conoce todos los secretos; yo sé como han sucedido las cosas y sé muy bien quién ha provocado la injuria y quién la ha recibido.
      Lo que ha sucedido, sucedió porque yo lo he permitido. De mí han salido estas palabras: Para que fueran descubiertos los pensamientos de muchos corazones (Lc. 2, 35). Yo sentenciaré entre culpabilidad e inocencia, pero antes quiero que uno y otro sean sometidos a un juicio no conocido por los demás.

martes, 2 de septiembre de 2014

Septiembre 2

         Si aún rehuyes la sumisión y la confusión causada por tus faltas, estás demostrando que no eres sinceramente humilde, ni que has verdaderamente muerto para el mundo ni que el mundo ha sido crucificado para ti.
         Si escuchas mi palabra, no prestarás atención ni siquiera a diez mil palabras de los hombres. Aun si se divulgan contra ti todas las calumnias que se puedan inventar con la mayor de las malicias, ¿que perjuicio te podrán causar si no les prestas atención y las consideras menos que una pajita? ¿Te podrán arrancar aunque fuera un solo cabello?

lunes, 1 de septiembre de 2014

Septiembre 1

CAPÍTULO 46

 CONFIAR EN DIOS CUANDO NOS CRITICAN

        1. Hijo, mantente firme y espera en mí. ¿Qué son las palabras sino palabras? Vuelan por el aire, pero no hieren la piedra. Si eres culpable, piensa decididamente en enmendarte. Aunque la conciencia no te remuerda, considera que igualmente todo lo debes sufrir con alegría por amor de Dios. No es una gran proeza si alguna vez debes padecer por algunas palabras puesto que no eres capaz de soportar grandes golpes.